ANTES Y DESPUÉS DE LA POLLINA/FLEQUILLO.

Si hay alguien que puede hablar de la transformación que implica una pollina esa soy yo. Pongamos el contexto: tengo un tipo de rostro alargado, lo que implica una frente amplia y unos cachetes tiernos -para no decir otra cosa-. Para disimular estos por mucho tiempo usé el cabello a la mitad y no voy a decir que me desagradaba porque en verdad no, pero hacia lucir mi rostro más largo. 

La pollina es especialmente buena para hacerte lucir fresca, te da la posibilidad de jugar y lucir tan segura como sexy. 

Aquí les dejo unos pequeños tips por si quieren tomar esa complicada decisión. Parece sencillo, pero te puede arruinar unos cuantos meses. 

Para las que tienen la cara redondeada:  Te va bien la pollina un poco más abajo de las cejas, abierta a la mitad -preferiblemente si es ondeada hacia afuera-. Ayuda demasiado a estilizar tu rostro. 

Si tu tipo de rostro es cuadrado o con muchos ángulos: Puedes usar la pollina de lado, con poco cabello para que ayude a suavizar tus facciones.

Para un tipo de rostro alargado: -Como yo- te hará un favor la pollina recta hasta la altura de las cejas, esta ayudará a acortar tu cara y la hará lucir más armoniosa. 

Si tu rostro es ovalado eres suertuda, puedes usar cualquiera tranquilamente, no hay mayor complicación.